Al caer una hoja, ella es libre.
Libre de escapar, de volver.
Es capaz de viajar miles de kilómetros
hasta caer
Puede flotar en el aire de la mañana
con el sol brillando plácido.
Bajo el cielo abierto sin nubes
ni sombras.
Puede arrastrarse entre la tierra
entre la sorna y la desdicha
buscando eso que la eleve
que la haga sentir viva
Tal vez solo se libera
de su árbol,
desdoblándose en miles de vueltas.
Siguiendo a la gravedad
hasta caer.
1 comentario:
sólo hasta caer, quizás*
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